ENTREVISTA A NUESTRO DIRECTOR, RAFAEL NÚÑEZ

1.- ¿Cuándo comenzaste a trabajar en el centro?

Empecé a trabajar hace cuarenta años, el 1 de Octubre de 1976, pero el centro estaba desde 1948. La escuela comenzó siendo un orfanato y luego un colegio normal hasta hoy. En 1976 se llamaba Instituto Social de la Marina (régimen especial al que se podían acoger los trabajadores del mar)


2.- ¿Cuáles son tus estudios académicos?
Hice una Formación Profesional (Maestría industrial) y después cursé una Ingeniería Técnica que no pude acabar por las circunstancias de la vida.


3.- ¿Qué momento importante destacarías dentro de tu trabajo?En primer lugar, para mí el mero hecho de comenzar a trabajar fue un reto importante. Tenía tan sólo veintiún años cuando me dispuse a enseñar en una FP2, cuyos alumnos eran mayores que yo; y otro momento decisivo de mi trabajo fue cuando se transfirieron los servicios del Ministerio de Trabajo a la Consejería de Educación, ya que ésta pudo convertir el centro en un colegio homologado por la Delegación de Educación.


4.- ¿Si no hubieses sido profesor, qué te hubiese gustado ser?
Desde pequeñito me encantaba la técnica electrónica, por eso mi verdadera vocación estaba en la Ingeniería electrónica, pero por circunstancias de la vida desemboqué en la Enseñanza. 

5.-¿Cuantos años llevas de director? 
Llevo desde el año 1994, cuando el Picacho era un colegio que tenía residencia y estuve hasta el año 2001. Pero después reinicié mi labor como director cuatro años más tarde, en el 2005.

 6.- ¿Qué momentos han sido para ti más difíciles y de qué manera han repercutido en tu vida personal?
Fueron difíciles los años en que dejé la dirección, porque quizás me cansé un poco. No creo que la labor de un director sea excesivamente complicada, pero sí exige mucha responsabilidad y tienes que estar al frente de todo, animando a los demás en sus proyectos y necesidades. Uno no siempre tiene la fuerza necesaria para emprender esa misión. Ahora estoy pasando por esa misma etapa, y creo que debo dejar paso a nueva savia, a gente con ganas de trabajar y de cumplir objetivos. De todas formas, me siento feliz del camino emprendido, ha sido una satisfacción permanente la de ejercer de profesor y director aquí en el centro.

7.-¿Qué cambios se han dado en el Picacho desde que se fundó?

Muchos, si pensamos que en 1948, cuando se creó, se hizo con el fin de hacer un orfanato para los niños huérfanos. Date cuenta que a estos niños no sólo les daban comida y educación, sino que recibían un control exhaustivo en todos los aspectos. Posteriormente, en los años 58/60, se empezó a impartir Bachillerato por libre, aunque los que estudiaban tenían que examinarse de todo el curso en el Coloma de Jerez de la Frontera. En el 73 se implantó la Formación Profesional (Electrónica, Automoción, Delineación y Marítima Pesquera), unos estudios que resultaron muy fructíferos y que dieron muchos puestos de trabajo. Lo curioso es que aquí venían niños de toda España.

8.- Ves mucha diferencia entre los alumnos de antes y los de ahora?
 Sí, pero eso va en consonancia con los cambios que exige la nueva sociedad. No creo que los alumnos de ahora sean mejores ni peores que los de antes, son simplemente diferentes, dado que estamos en un mundo en constante evolución, donde la tecnología ha revolucionado el mercado laboral y, por ende, la forma de ser las nuevas generaciones. Por otro lado, la manera de aprender también es distinta, y los profesores tenemos que indagar y buscar en nuevas vías de aprendizaje para llegar cada vez más y mejor a nuestros alumnos.

9.- ¿Crees que has visto tus objetivos cumplidos como profvesor y director a la vez? ¿De qué éxito te sientes más satisfecho?

Casi nunca uno acaba por cumplir todos sus objetivos. Es muy difícil lograr la perfección, pero más que valorar el final como meta, hay que valorar el camino, y sobre todo el esfuerzo empleado en ese trayecto. En ese sentido, si tuviera que dar una puntuación al picacho del cero al diez, le daría un siete o un ocho.
De todos los éxitos, del que me siento más satisfecho es el de Convivencia escolar. En este curso, hemos conseguido por cuarto año consecutivo ese premio de convivencia gracias al esfuerzo de todos, y eso es muy difícil porque son muchos los centros que compiten por el mismo galardón.


10.- ¿Echarás de menos el Picacho cuando te vayas?
Claro que sí. De hecho , algunas veces, cuando estoy en clase, recogiendo mi material, me entra una cierta melancolía. Tan sólo con pensar en que el año que viene ya no estaré aquí, me pongo nostálgico. Es una sensación muy extraña. Daros cuenta de que llevo en el IES El picacho cuarenta años ejerciendo como profesor. Este instituto ha sido para mí una parte de mi vida muy importante, además de mi familia.

Alumnos colaboradores: Macarena Carballo, Margarita Establiet, Aymé Rodríguez